¿Por qué una arandela de metal se llama arandela?
Las arandelas son discos metálicos pequeños y planos con un orificio en el centro. Se utilizan comúnmente en diversas aplicaciones para distribuir la carga de un sujetador, como un perno o un tornillo, y para evitar daños a la superficie que se sujeta. El término "lavadora" parece bastante simple, pero ¿alguna vez te has preguntado por qué en realidad se llaman lavadoras? En este artículo, profundizaremos en la etimología de la palabra y exploraremos los orígenes y el significado de este componente de fijación de uso común.
Orígenes del término "lavadora"
El término "lavadora" se originó en el idioma inglés durante el siglo XIV. Proviene de la palabra del inglés medio "waschen", que significa "lavar". Inicialmente, el término se utilizaba en relación a la acción de limpiar o lavar la ropa. Sin embargo, con el tiempo, el término “lavadora” empezó a asociarse a otros objetos y funciones más allá del lavado de ropa.
Se cree que la adopción del término para el disco metálico con un orificio central está influenciada por el concepto de limpieza o separación de diferentes materiales. Cuando se coloca una arandela entre el sujetador y la superficie, se puede ver como una barrera que mantiene separados estos dos elementos, evitando que entren en contacto directo. En cierto modo, la lavadora realiza una función similar a la de separar y limpiar la ropa, de ahí el nombre "lavadora".
Importancia y función de las lavadoras
Las arandelas pueden parecer simples, pero desempeñan un papel crucial en diversas aplicaciones mecánicas y de construcción. Exploremos su significado y funciones con más detalle.
1. Distribución de carga
Una de las funciones principales de una lavadora es distribuir la carga ejercida por un sujetador sobre un área mayor. Cuando se aprieta un perno o un tornillo, se crea presión sobre la superficie que se está sujetando. Sin arandela, esta presión se concentra en un área pequeña, lo que puede dañar el material o hacerlo vulnerable a aflojarse con el tiempo.
Al utilizar una lavadora, la carga se distribuye sobre una superficie mayor, reduciendo la presión en cualquier punto. Esto ayuda a prevenir daños, aumenta la estabilidad de la conexión y mejora la resistencia general y la longevidad de la fijación.
2. Protección de superficies
Además de distribuir la carga, las lavadoras también brindan protección de superficies. Al unir materiales, existe el riesgo de rayar, estropear o deformar la superficie. Una arandela actúa como una barrera protectora entre el sujetador y el material, minimizando el contacto y reduciendo las posibilidades de dañar la superficie.
Por ejemplo, si está fijando un perno de metal a un componente de plástico frágil, la arandela evitará que el metal toque directamente y potencialmente agriete o deforme el plástico. Esto es particularmente importante en aplicaciones donde la estética o la integridad estructural del material es primordial.
3. Precarga y acción de resorte
Las arandelas también pueden proporcionar precarga y acción de resorte. La precarga se refiere a aplicar una fuerza de tensión o compresión a un sujetador antes de su uso previsto. Esto puede ayudar a compensar cualquier asentamiento, aflojamiento o expansión térmica anticipada que pueda ocurrir con el tiempo.
Ciertos tipos de arandelas, como las arandelas Belleville o los resortes de disco, exhiben propiedades similares a las de un resorte. Pueden absorber y liberar energía, mejorando así la resiliencia y la capacidad de la junta fijada para soportar cargas dinámicas, vibraciones o estrés térmico. Estas arandelas pueden actuar como amortiguadores, compensando el juego o movimiento natural que pueda producirse en los componentes conectados.
Tipos de lavadoras
Las lavadoras vienen en una variedad de formas, tamaños y materiales para adaptarse a diferentes aplicaciones y requisitos. Algunos tipos comunes de lavadoras incluyen:
1. Arandelas planas
Las arandelas planas son el tipo de lavadora más básico y comúnmente utilizado. Tienen una superficie plana a ambos lados y un agujero en el centro. Las arandelas planas se utilizan principalmente para distribución de carga y protección de superficies.
2. Arandelas elásticas
Las arandelas de resorte, también conocidas como arandelas de seguridad o arandelas divididas, están diseñadas con forma dividida o helicoidal. Esta forma proporciona una acción similar a un resorte, que ayuda a mantener la tensión y evitar que se afloje debido a vibraciones u otras fuerzas externas. Las arandelas de resorte se utilizan a menudo en aplicaciones de alta vibración o donde es posible que sea necesario apretar y reapretar regularmente.
3. Lavadoras Belleville
Las arandelas Belleville, también conocidas como arandelas de resorte cónicas, tienen forma cónica y proporcionan altas cargas de resorte en un espacio pequeño. Están diseñados para soportar cargas elevadas, altas temperaturas y una posible relajación del estrés. Las lavadoras Belleville encuentran aplicaciones en industrias como la automotriz, la de generación de energía y la aeroespacial.
4. Lavadoras onduladas
Las arandelas onduladas, como su nombre indica, tienen forma ondulada y proporcionan flexibilidad axial y amortiguación de vibraciones. A menudo se utilizan en aplicaciones donde es necesario compensar la desalineación, la expansión térmica o mantener la tensión en uniones atornilladas en condiciones variables.
Conclusión
La humilde arandela de metal puede parecer un componente simple, pero cumple un propósito importante en muchas aplicaciones mecánicas y de construcción. El término "arandela" surgió del concepto de limpieza o separación de materiales, y la función de mantener separados dos elementos es igualmente importante en aplicaciones de sujeción. Las arandelas distribuyen la carga, protegen las superficies, proporcionan precarga o acción de resorte y vienen en varios tipos para satisfacer necesidades específicas. Entonces, la próxima vez que te encuentres con una arandela de metal, sabrás que hay más que solo un nombre.